El pasado martes 1ro de Mayo se
conmemoró el Día de los Trabajadores. Sin embargo, en el tradicional acto
realizado en Montevideo, el tema central
no fue el empleo. Esto no resulta llamativo de acuerdo a las últimas cifras y
los grandes avances logrados a pesar de
la crisis internacional.
De acuerdo al último informe de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT),
Uruguay se encuentra dentro del reducido conjunto de países que han
aumentado el nivel de empleo sin afectar su calidad (Torres 2012). Datos del 2009 dan cuenta de la
reducción del subempleo, de empleos de mala calidad y del número de
trabajadores no registrados en la seguridad social (Notaro 2009). Según datos recientes del Instituto
Nacional de Estadística (INE), ha aumentado la tasa de actividad (personas
trabajando y dispuestas a trabajar) y el desempleo se ha reducido prácticamente
a la mitad desde 2006 hasta la fecha (11. 4% en 2006 respecto a 6% en Febrero
de 2012). Sin embargo, el desempleo sigue concentrándose en las mujeres ( 8.1%)
y en los menores de 25 años (18.4%). Mientras el desempleo femenino duplica al
masculino, el desempleo juvenil es cinco veces mayor que el desempleo entre los
adultos. A pesar de los avances generales en el desempleo, estas brechas se
mantienen dando cuenta de un fenómeno estructural.
Otro aspecto que se mantiene, a pesar de los avances mencionados, es la brecha de los salarios. Esta se
manifiesta principalmente por género y por nivel educativo. En primer lugar, las mujeres reciben en
promedio un 30% menos de ingresos que los varones. La hora trabajada por las mujeres vale 13%
menos que la trabajada por ellos (INMUJERES 2010). En segundo lugar, según estimaciones
para el año 2005 la diferencia de ingresos
entre quienes completan Primaria y quienes completan Ciclo Básico es de tan
solo $U700. Quienes completan Educación Media Superior reciben ingresos de
$U3000 adicionales que quienes completan Ciclo Básico, y quienes completan
estudios universitarios reciben casi el triple de ingresos que quienes solo
completaron Ciclo Básico y aproximadamente el doble respecto a quienes
completaron Educación Media (Patron 2011). Considerando que ni siquiera un tercio
de la población uruguaya completa al
menos Educación Media (Instituto Nacional de
Estadística 2011), no es de esperarse una mejora en las
brechas salariales en el mediano plazo.
En lo que refiere la situación de los jóvenes en el mercado laboral, ésta
resulta apremiante. Según datos de la
última Encuesta Nacional de la Juventud (ENAJ) la mayoría de los jóvenes no
realizan aportes jubilatorios en su primer empleo, y el 14% de quienes
aportan no lo hacen por la totalidad de
su salario. La desprotección social es mayor entre los más jóvenes y entre los
menos educados. Solamente un tercio de los jóvenes que se insertan al mercado
laboral con Primaria completa realizan aportes a la seguridad social respecto a
ocho de cada diez de los jóvenes con educación terciaria (MIDES-INJU 2009).
A fin de superar los desafíos mencionados, las políticas activas de empleo
son prioritarias. El programa “Yo estudio y trabajo” del Ministerio de Desarrollo Social, que
brindará experiencias laborales a jóvenes en empresas públicas es una buena
señal en este sentido aunque ofrecerá solamente 700 cupos. En lo que refiere a la brecha de ingresos por
nivel educativo, no queda más que apuntar a reducir la deserción temprana y mejorar
la calidad de la educación. Hoy contamos con diferentes propuestas educativas
–concentradas sobretodo en evitar el abandono-, aunque los resultados no dan
cuenta de la inversión realizada en tiempo ni recursos monetarios. Por último,
en lo que respecta a la brecha de ingresos por género no se han realizado
avances en materia de políticas, a pesar de que la participación laboral
femenina y los hogares con jefatura femenina han aumentado en los últimos años.
Aunque el contexto internacional nos considere excepcionales y se reconozcan las mejoras en los actos conmemorativos, aun
queda mucho por recorrer. Hoy contamos con recursos,para ofrecer soluciones a problemas estructurales, y no deberían desaprovecharse.
Referencias
INMUJERES. 2010. Desigualdades
en los ingresos: ¿qué es de la autonomía económica de las mujeres?
Montevideo, Uruguay: Ministerio de Desarrollo Social -Instituto Nacional de las
Mujeres.
Instituto Nacional de Estadística. 2011. “Uruguay en cifras 2011.”
MIDES-INJU. 2009. Segundo informe de la Encuesta Nacional de la
Adolescencia y Juventud. Montevideo, Uruguay: MIDES-INJU.
Notaro, Jorge. 2009. “El trabajo remunerado en el Uruguay 2004-2009.” Revista Quantum IV(2).
Patrón, Rossana. 2011. When
more schooling is not worth the effort: another look at the dropout decisions
of disadvantaged students in Uruguay. Uruguay: Departamento de Economía de la Facultad
de Ciencias Sociales (UDELAR).
International Labor Office. 2012. World
of Work report. Better jobs for a better economy. International Labour
Organization - International Institute for Labour Studies.